Alberto Undiano Mallenco, del Colegio Navarro de Árbitros, está en su
decimoctava temporada en Primera División. Como dice Wikipedia, “debutó en Primera División de España el 10
de septiembre de 2000, con 26 años, en un Club Deportivo Numancia-Real Oviedo
(1-0) ostentando, hasta el momento, el récord de ser el árbitro más joven en
ascender a primera”.
A lo largo de sus primeras trece temporadas en Primera División, arbitró hasta en 39 ocasiones al Real Madrid, y en 35 al F.C.Barcelona, en las diferentes competiciones nacionales (Liga, Copa del Rey y Supercopa de España). Con sus arbitrajes, el Real Madrid ganaba un 67% de partidos, empataba un 18% y perdía un 15%. El Barcelona, con este árbitro, tenía unos números algo peores, ganando el 51% de los partidos, empatando el 34% y perdiendo el 14%.
Posiblemente, hay un antes y un después de la semifinal de Copa del Rey que enfrenta a ambos equipos en la temporada 2012-13. El Real Madrid de Mourinho agonizaba tras una temporada llena de polémicas y al Barcelona lo entrenaba Jordi Roura que, el día antes del partido, enviaba un aviso al árbitro: "La designación arbitral es la que es, nosotros no lo valoraremos aunque es cierto que con este árbitro nuestros números bajan bastante y el último partido de Liga con él lo perdimos. Incluso tenemos en la memoria la permisividad en la final de la Copa (contra el Real Madrid), pero esperamos que sus decisiones no marquen el partido y pase desapercibido".
En aquel partido, el Real Madrid ganó 1-3 en el Nou Camp y se clasificó para una final de Copa del Rey que después perdería contra el Atlético de Madrid. Undiano señaló un penalti de Piqué sobre Cristiano Ronaldo, y sacó tarjetas amarillas al propio Piqué y a Puyol, por parte del Barcelona, y a Arbeloa por parte del Real Madrid.
No queda muy claro qué ocurrió a partir de ahí, pero alguien debió hablar con Undiano Mallenco sobre sus números.
En la siguiente temporada 2013-14, es designado para los siguientes partidos del
Real Madrid:
FCB, 2 – RMA, 1 (Liga) – 5 tarjetas amarillas al RMA (Ramos, Bale, Khedira,
Marcelo, Ronaldo), 2 al FCB (Busquets y Adriano).
ATM, 0 – RMA, 2 (Copa) – 3 Amarillas al RMA (Arbeloa, Illarra, Ronaldo), 1
al ATM (Miranda)
RMA, 3 – FCB, 4 (Liga) – Expulsión de Ramos y 5 amarillas al RMA (Pepe,
Alonso, Modrić, Di María, Ronaldo), 2 amarillas al FCB (Cesc , Busquets)
Y, desde esa temporada hasta la actual, los números de Undiano con Barcelona y Real Madrid experimentan una transformación muy llamativa.
Desde la temporada 2013-14 hasta la actual, Undiano ha pitado al F.C. Barcelona 16 veces, con unos porcentajes sorprendentes: un 88% de victorias, un 6% de empates y un 6% de derrotas. Al Real Madrid le ha arbitrado 15 veces, con un 53% de victorias, un 13% de empates y un 33% de derrotas. Resultan unos datos llamativos, en ambos casos, por dos motivos:
- el primero, que esos porcentajes resultan muy dispares en relación a los que tenía en los primeros 13 años de carrera arbitral. El Barcelona, desde septiembre de 2013, ha experimentado una mejora en victorias del 37% y un decremento en los empates de un 28% y en las derrotas de un 6%. Por el contrario, el Real Madrid ha experimentado un empeoramiento claro en las victorias (-14%), en los empates (-5%), y un incremento desmesurado en las derrotas (+18%).
- el segundo que, en el caso especialmente del Real Madrid, sus porcentajes no se corresponden en absoluto con los que el equipo ha tenido en esas temporadas. Respecto a los porcentajes promedio de esas temporadas, el Real Madrid pierde un 20% más de partidos con Undiano, empata un 2% menos, y gana un 19% menos.
Quizá algún día sabremos qué ocurrió en aquellos meses de 2013 con Undiano Mallenco, y cómo se produjo esta mutación en él.
Puede parecer que este misterio ya es, de por sí, suficiente para entender ciertas cosas. Pero no, aún quedan unos cuantos. La próxima entrada se la dedicaremos a La transformación de Mateu Lahoz, otro misterio fascinante.
La posición del árbitro no es buena;
ResponderEliminarÉl necesita muy buena vista y habilidades de juicio;
Jugó un papel decisivo en ganar o perder el equipo;